Todo indica que, al parecer los números de febrero, sobre la preferencia electoral, no eran los que vendía la oposición.
Lo mismo se vislumbra de cara a las elecciones del próximo 19 de mayo. La oposición luce desorientada; incierta, vendiendo una percepción de «unidad» con la mal llamada «Alianza Rescate RD» que no se corresponde con los recientes resultados electorales.
Lo peor del caso es que, más allá de reconocer la crisis electoral por la que están pasando, se han concentrado en tratar de justificar la arrolladora derrota, en las pasadas elecciones municipales, con acusaciones vanas y sin fundamento, como la supuesta compra de cédulas y la abstención de los votantes.
Dos fenómenos que siempre han estado presentes en los diferentes torneos electorales que hemos celebrado.
Aunque esto no signifique que necesariamente sea correcto. Son males y delitos que están ahí, y que son inherentes a todos los partidos.
Lo que indica el presente panorama electoral es que, estamos ante el fenómeno atmosférico PRM, que conquistará mayoría en el Senado y sellará el 19 de mayo con el triunfo contundente del presidente Luis Abinader en primera vuelta.
Con esto se elimina la posible segunda vuelta a la que apuesta la oposición.
Han predominado en la presente campaña electoral la angustia, las ansias de poder por parte de los opositores, adornada con las flores de la desconfianza, que no tiene otro destino que la nueva derrota que sufrirán el 19 mayo próximo.